martes, agosto 26, 2008

Retratos de Buenos Aires "Porteña"


Retratos de Buenos Aires


Una muestra fotográfica del Grupo Porteña


La porteñidad es un espacio entre lo obvio y lo obtuso, como diría Barthes, su encanto es esa identidad que no termina de definirse, tal vez por eso los porteños buscamos reconocernos en la senda existencial de los pasos perdidos que caminaron otros, dando vueltas a la esquina de la huella.

Hay algo de poema salvaje en Buenos Aires, un sinsentido que invita a descifrarla.

Bordada en plata de viejos adoquines al sur de un puerto turbio y Puente Alsina; al norte Recoleta, la tragedia en el arte del mármol de Carrara , y en la vieja herrería de San Telmo un jazmín, una viola, un bandoneón que llora, entre zarzas y brillos, aquel perdido lengue en tanguerías, galante y compadrito.

Al tanteo en estos laberintos se re- vuelven los tiempos, las cosas, los retazos de vida. Pareciera que un escultor de gestos la tatuara majestuosa, sencilla, marginal, borgeana y complicada Buenos Aires!

Será que esta ciudad está escrita en puntos suspensivos o como un tango de Piazzolla se escapa en fuga del sentido de lo obvio, nos atrapa en las profundidades de lo obtuso así de indescifrable: tan misteriosa y luna.

Elena de San Telmo




“Y ser, al menos una vez, nosotros,
sin ese tinte de un color de otros.
Recuperar la identidad,
plantarnos en los pies
crecer hasta lograr la madurez.
Y ser, al menos una vez, nosotros,
tan nosotros, bien nosotros, como debe ser...

Eladia Blázquez


Unas palabras más....


Me siento honrada de que una de mis fotografías de Buenos Aires haya sido seleccionada en esta Muestra.

Mi agradecimiento a Adriana, a los directivos del Museo Fotográfico Simik, a todos los integran tes del Grupo Porteña y a los bloggers amigos que difundan el evento.

"cóncavo y convexo"


Museo Fotográfico Simik

Reeditado 8 de setiembre de 2008



domingo, agosto 10, 2008

Digresiones escritas de un tirón

Alguna vez revisaste tu historia, recorriste tu vida, te enfrentaste a los hechos?

Te preguntaste si aceptas el devenir de la existencia, que todo es cambiante, que somos efímeros?

Te detuviste a rescatar lo vivido más que quejarte de lo sufrido?

Alguna vez te planteaste cuáles son tus circunstancias?

Te diste cuenta que hay un límite entre querer y poder?

Transformaste tus errores en sabiduría?

Juzgaste a los demás como falibles?

Reconociste que las vínculos no son eternos?

Supiste descubrir tu deseo y tu verdad?



Y por último pero no lo definitivo....


Te permites disculparte por lo que no puedes, no has podido, ni podrás?

Estás dispuesto a intentar nuevos caminos, desafíos y riesgos aunque seas efímero, falible y diferente sabiendo, desde el principio, que la verdad que no tiene remedio es que los demás también lo son?