viernes, septiembre 07, 2007

Fontanarrosa y "El Cairo"


Desde abril todos los jueves de 22 a 23.00 hs. Canal 7 Argentina, lleva a la pantalla los Cuentos de Fontanarrosa. ¡Imperdible!

Ayer me deleité con uno de los cuentos de El Negro. “El día que cerraron El Cairo”. ¡ Grande, Fontanarrosa!

Así lo vi, así lo cuento:


El día que cerraron "El Cairo"

“Ni es cielo ni es azul.
¡Lástima grande que no sea verdad tanta belleza!”


Al estar cerrado el café de todos los días , "El Cairo", el protagonista, decide ir al Savoy a buscar a los muchachos.

El Savoy es otro bar, que queda a dos cuadras. Para llegar, tiene que cruzar "la avenida".

Él nunca había cruzado"esa" avenida . Está dubitativo en el cordón, los autos y colectivos pasan frente a él. Al fin se decide.

Cuando llega a la puerta del boliche, conoce a una hermosa chica que le invita a un café, luego a su casa.

Ella convive en un mundo distinto, se alimenta de semillas de sésamo, cultiva el pensamiento zen.

Todo es novedoso para nuestro personaje, que no hace más que mirar lo bien que está la "mina”. La chica lo cita nuevamente en su casa para el otro día a las 7 de la tarde.

Al día siguiente,
en otra escena, se ve un grupo de hombres en el bar; están escuchando lo que les cuenta el osado protagonista: la joven, su mundo y el anhelado encuentro que promete toda clase de fantasías.


-"Pero, che"...- dice uno de ellos- "ya son las 7 y media, no vas a verla?"

"Quería contárselo a ustedes"- contesta- ¿"qué gracia tendría si no se los contara a ustedes...?"

Después de un silencio, alguien comienza a hablar de fútbol.
Las discusiones de siempre... él se queda, como todos los días, en el bar con sus amigos.


Este cuento me trajo el recuerdo de la avenida de mi barrio natal: Flores.


“La avenida”


Cruzar "la avenida" no es cualquier cosa en un barrio.
Recuerdo que en Flores, la avenida dividía las zonas de los unos y de los otros. "El otro lado" era un mundo diferente.
Mis padres me tenían prohibido cruzar esa avenida. Era distinta a las otras cuadras más tranquilas. Allí los autos pasaban a toda velocidad.
A veces, me escapaba, cruzaba la avenida y volvía. Todo era adrenalina, me sentía una aventurera descubriendo nuevos mundos. Luego, el retorno a casa, el hogar, el ritmo lento, la rutina de todos los días...como en el cuento del bar El Cairo.


"El Cairo"


Por el bar El Cairo, pasaron JM Serrat y Sabina.

"Todos los que íbamos a El Cairo tenemos muchísimas anécdotas para contar de situaciones risueñas y otras no tanto, que se dieron ahí en aquellos años", recordaba"El Negro" Fontanarrosa, el parroquiano más célebre del bar. Leer más.

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado:
Juana lo invita a retirar su premio por su blog.
Muchas felicitaciones!

Anónimo dijo...

es estimada jajaja jajaja bueno cheeeeeee un error cualquiera!
100 errores: Juana
besisisis

...flor deshilvanada dijo...

Fontanarrosa, nuestro grande de siempre, no sabía que dan por ATC un programa con sus cuentos, casi ni miro tele, pero a esto lo tendré en cuenta.

Cuando te leía, apreciaba la gran diferencia que existe entre Bs As y el interior, que con solo cruzar una avenida era como si entraras en otra ciudad, más bulliciosa o peligrosa si se quiere. Como si fueran dos pueblos.

Te dejo un beso grande, es un placer cruzar por aquí!!

Lindo finde!!

MAYA dijo...

Elena querida: Gracias por el dato, correré al cable para no perderme la oportunidad. Ya leí el informe completo de la Nación. Un bar histórico. Espero poder visitarlo cuando llegue a tu país, que espero sea pronto para visitar a unos amigos a los cuales les prometí un encuentro.

Y estoy totalmente de acuerdo. Cruzar "la avenida", no es cualquier cosa. Es toda una aventura, en especial cuando nos lo han prohibido. Pero cuando una es chica hace caso omiso de esa advertencia, pues más nos jala la adrenalina de la curiosidad y la travesura.

Yo necesito volver a cruzar muchas avenidas, en eso estoy, recuperar esas ganas de traspasar ciertos límites, siempre para estar mejor.

Un beso bella y que tengas un buen fin de semana.

Maya

Carlos dijo...

Cruzar la avenida, casi como una metáfora de la vida misma.

Dame la mano, crucemos juntos.

Un beso grande.

Claudio - Poca Tinta dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Claudio - Poca Tinta dijo...

Que pena no lo pueda ver en Peru, en mi señal de cable solo tengo 4 canales de Argentina, y mi jefa (esposa), vee el 50% del tiempo utilisima satelital.
Saludos

Recomenzar dijo...

Mi querida gracias por tu visita, siempre te recuerdo.Si queres escribir alg mi blog esta abierto a mis queridas bloggers. me encanta tu escrito te quiero

nick dijo...

Las avenidas...yo era tan niño como tan "salame. Mi principal creencia era que despuès de la avenida empezaba otro paìs...y como no tenìa pasaporte, seguro que no me iban a dejar cruzar...
Creciendo me avivè, y me dì cuenta que para ir a ese paìs cruzando la avenida necesitaba sòlo la cèdula de identidad.
Quede claro que ,por las dudas, me llevo tambièn el pasaprte...
Un besick
Nick Pasaportìck

modes amestoy dijo...

las avenidas, las prohibciones de nuestra infancia siempre nos han producido esa sensación.
Bello relato y gracias por enseñarnos un poco más tu mundo.
Un abrazo y gracias por tus palabras, siempre son muy bien recibidas.

nick dijo...

tremb en seràs loquedebaser

nick besis

Anónimo dijo...

Yo lo estaba siguiendo! y ví este msimito jelen jelen, wow, nos habremos estado mirando a través de Fontanarrosa?
Un maestro, un grande. Un espíritu de luz.
Como la luz que nos dejás vislumbrar en todos tus escritos.
Querida amiga, un gran abrazo sideral, Argiropolismente en tu corazón, en este día recordando al Maestro.
La pluma y la palabra.

Unknown dijo...

AYYY... ELENA DE SAN TELMO
ME HA LLEVADO MUY LEJOS....
SI, CUANDO ERA JOVEN.

HABÌA POR AQUEL ENTONCES UNA CALLE QUE DIVIDÌA LOS BARRIOS.

UNO, AL TRASPONERLA, SE SENTÌA COMO UN EXTRANJERO AL PISAR ESE SUELO.

LAS MIRADAS NO ERAN LAS MISMAS, LO MISMO OCURRÌA CUANDO NOS "INVADÌAN" DEL OTRO LADO.

HABÌA MUCHA "PICA" ENTRE AMBOS LADOS.
SE PREGUNTARÀ ¿PORQUÈ?,
ES QUE LOS DOS BARRIOS TENÌAN EQUIPOS DE FÙTBOL Y COMPETÌAN EN CAMPEONATOS BARRIALES...

HUBIERON TRIFULCAS VARIAS...

HOY SE RESPIRA PAZ.

YA NO HAY "POTREROS", POR ENDE, TAMPOCO FÙTBOL..NI BARRILETES, NI "HOYO PELOTA", NI TROMPO, NI CARRITOS DE RULEMANES, NI FIGURITAS, NI BOLITAS, NI......BARRIO!
EL "PROGRESO" SE LLEVÒ TODO...


AMIGA, QUE SUS HORAS SEAN HERMOSAS!!!


BESOS MIL

ADAL

GRANDE "EL NEGRO",
BIEN POR RECORDARLO!

Doncel dijo...

Elena:
Un placer saludarte.
Te he creado un vinculo en mi página. Si no estás de acuerdo me lo dices y lo quitaré, no hay problema
Saludos Antonio

Elena Bravo "Elena de San Telmo" dijo...

Joana, Joana, Evan, Maya, Carlos, Claudio, Solei, Nick, Modes Amestoy, Adal, Doncel....

Han cruzado "la avenida" dejando las huellas de sus experiencias y recuerdos. Es el mejor homenaje al Negro Fontanarrosa.

Gracias a todos!

Doncel es un honor que me hayas linkeado.

PD:Y ahora me voy a tomar unos mates... FELICIDADES A LOS MAESTROS EN SU DÍA.

Besos

Ele

Unknown dijo...

Querida Elena:
¡Cuántos recuerdos!!!
Allá por el '89 (yo estaba estudiando en Rosario), recalé por el bar El Cairo, y allí comenzó una historia de chismes y miradas y correveydiles e intervenciones mías en una de las radios locales. Así fue como el Negro se enteró de mi existencia, y, por ende, también el Nano. Tanto fue así, que cuando salió la Utopía, estaba segura de que Mírame y No Me Toques era el relato de la historia de El Cairo...
Gracias por hacer aflorar tantos recuerdos!
Alejandra

Elena Bravo "Elena de San Telmo" dijo...

Querida Alejandra

Ohhh me sorprendés. Tantos años escribiéndonos a través del grupo y que yo sepa nunca lo has contado, o sí, y yo me lo perdí.
Qué dicha haber estado con el Negro... me tenés que contar lo de NANO!
El Cairo y Fontanorrosa nos ha convocado, enhorabuena!
Gracias por compartir estos hermosos recuerdos.
Te escribiré a tu correo quiero saber más!

Besos